- Defina un tema lo bastante vago como para que nadie se atreva a refutarlo, o para que usted pueda re-refutar si algún día lo refutan. Algo como “Rasgos de lo inconmovible en algunos versos de la poesía medieval escandinava”. Se recomienda agregar un subtítulo, igual de vago pero el doble de largo. Generalmente no tiene importancia que usted no tenga idea de lo que está diciendo.
- Empiece con una serie de consideraciones sobre sus objetivos al escribir el ensayo. Bastará con que use formas alternas de redacción del título y le agregue algunas frases igualmente vanas. No dude en incluir conceptos como “análisis comparativo”, “contexto sociopoético” o “marco conceptual”.
- Opcionalmente puede agregar comentarios sobre los libros que supuestamente utilizó al escribir su ensayo, haciendo alusión a las teorías de sus autores. No necesita profundizar en ellas: trate al lector como si éste se hubiera leído ya todos esos libros y le resultara obvio que lo que usted está diciendo es una verdad sacrosanta.
- Si empieza a redactar y se tranca, use muchas citas. Al menos un 40% del ensayo debe estar constituido por párrafos que empiecen con la frase “Según Fulano de Tal…” y antecedan a una sustanciosa cita. Procure que en las citas se incluya conceptos como “análisis comparativo”, “contexto sociopoético” o “marco conceptual”. Mientras más largas sean las citas, mejor, pues le ayudarán a llenar páginas. Procure que las citas estén en el idioma original.
- Cada vez que escriba uno de esos profundísimos conceptos, inserte una nota a pie de página que remita a un libro. En la nota, de ser posible, cite no sólo una frase críptica del autor, sino además relaciónelo con otros libros de títulos y autores igualmente crípticos. También agregue muchas veces notas del tipo “Op. cit, pp. 345-349”. Se recomienda agregar notas en cantidad de diez a quince por página.
- No olvide clasificar la información. Ponga títulos, subtítulos y subsubtítulos con sistemas de números y letras, mezclando los temas conforme vaya profundizando en el escalafón. Ayuda mucho a la extensión del ensayo escribir párrafos sumamente crípticos organizados en subtítulos como “5.4.3.a.i. Marco conceptual de lo inconmovible en la poesía medieval escandinava de épocas tempranas”, “5.4.3.a.ii. Marco conceptual de lo inconmovible en la poesía medieval escandinava de épocas tardías” y “5.4.3.b. Análisis comparativo del marco conceptual de lo inconmovible en la poesía medieval escandinava de épocas tempranas y tardías”.
- Un ensayista que se precie debe incluir una bibliografía de al menos 30% de la extensión del ensayo. Usted tiene que demostrar que ha leído más que cualquiera de los autores que cita.
- Además de escribir ensayos, gánese algunos amigos. Los nombres propios y otras palabras de difícil ortografía deben ser escritos a veces bien y a veces con un error casi imperceptible. También procure separar algunas palabras entre sí con dos espacios en vez de uno. Eso le proveerá de un profundo cariño por parte de correctores y diagramadores.
- Si le piden una nota biobibliográfica, esa es su oportunidad para demostrar que no es un don nadie. Incluya cada uno de los pasos que ha dado desde el primer día de escuela, cada concurso en que haya participado (aunque no haya ganado), cada acto cultural en el que haya estado así haya estado en el público. Divida su nota biobibliográfica en secciones como “Actividades sociales”, “Actividades culturales”, “Actividades civiles”, “Actividades deportivas”, todo lo que se le ocurra.
Categoría: Siendo un escritor
-Jorge, ¡tu no tienes remedio! Cuando se te sale lo cínico…»a joder se ha dicho»… y por supuesto, yo gozo una y parte de otra-
Me da escalofrios el solo pensar en la posibilidad de encontrarme alguna vez con un ensayo inutil. Me imagino que uno titulado «El socialismo del siglo XXI» debe ser asi, minuciosamente inutil.
Ermanno, siempre es un placer comentar estas cosas con los amigos. Salúdame a tu gente, por favor.
Roberto, justo cuando escribí sobre las diferencias entre culto y cursi pensaba en el florido a-lenguaje de los milicos. Lo cual, por supuesto, merece otra nota, para otro día.
el próximo 27 te quedarás atrapado en el ascensor
Lo dirás de broma, pero es en serio. si siguiera tus consejos al pie de la letra, sería un éxito en la universidad.
Saludos
Sencillamente genial. Hice un enlace desde mi blog. Saludos afectuosos.
Ser un verdadero intelectual es siempre más fácil de lo que uno se imagina.
Saludos,
GS
Por fin encontré la fórmula perfecta para ser un ensayista respetado y admirado. Imagino que al final de mi vida podrán decir: «El que escribía como el traje del emperador».
Que humor tan elegante, sólo puedo decir gracias por lo que nos has regalado.
Saludos sarcásticos desde Guanare 🙂
Ay profesor, empecé a sonreir desde el inicio de su texto, pero no pude refrenar la carcajada en el último punto, ¿será porque en mi vida he preparado algunas pedantes notas bibliográficas, pero nunca un ensayo?
Es usted genial.
Jajajajajajja! Muy bueno!
Un decálogo de nueve puntos para asegurarte de que ni tu santa leerá el ensayo 🙂
Saludos,
GENIAL PROPUESTA Y TE ASEGURO QUE CON TANTOS PROFESORES MEDIOCRES, ESOS ENSAYOS SE INFLARÁN DE COMENTARIOS TAN VAGOS COMO EL CONTENIDO.
SIEMPRE LEO SUS ARTÍCULOS, MEJOR DICHO, SUS CREACIONES LITERARIAS.
UN ABRAZO, ADMIRO SU TRABAJO.
La vaguedad es muy del sur de Europa y de Latinoamerica. En estos paises nórdicos por el contrario ése tipo de ensayo jamás se le ocurriría a un escritor. Je je je
Muy divertido, Jorge.
Por fin los mecanismos de la intelectualidad (así la llaman) sacados a la luz.
A seguir así.
Nada que Jacques Derrida no haya hecho… Recordemos «La disseminacion», donde el susodicho se lanza un ensayo sobre Stephane Mallarmé y remite a las notas al principio del libro que se supone deben estar «como una pizarra» detras del lector a todo momento. O la sutil disertacion de Eco sobre Kant y el Ornitorrinco. En fin, ese tipo de temas, pues…
Acabo de ver a un tipo que propone una clase de «ética en la escritura de la musica», que creo cae en tu nota. Porqué no hacer una clase de «Principios cuanticos en la 5ta de Bethoveen», ya que estamos…
Saludos!
Pues yo me tomaré en serio este ensayo para escribir ensayos para tratar de convertirme en un ensayista de renombre, de esos que todos conocen pero nadie ha leído y que por lo mismo invitan a cuanta fiesta de presentación de libros o apertura de galerías se lance en la ciudad. Así podré comer y beber vinos o espumantes al menos una vez a la semana, por los siglos de los siglos.
Gracias, Jorge!
Jorge: Para quienes nos atrevemos a asomarnos a esos ensayos escritos con «tu metodología» (de los cuales hay muchos) al tercer párrafo desistimos y no nos estimula ni el conciente ni el inconciente, ni siquiera el remordimiento de no haberlo leído. pero… está plagado el universo de letras de esto que un político colombiano llamó «verborrea vergonzante».
Gracias por ese agracable momento de cinismo.
Desde Medellín un saludo… de poeta
No deja de causarme gracia lo que escribes, cuando bien representa por lo general grandes verdades. La mayoría de los ensayos se remiten precisamente a eso: vaguedades y pseudo-intelectualismos, que bien no son ni malos ni buenos en un sentido absoluto. Me declaro culpable tanto de uno como de lo otro.
Muy buen post. 🙂
…me parecio mui atrayente tanto interesante la menera en qe resalta eso…
el tem esta bien chilo la neta si me gusto haha ..nomas aqui dejandole una nota..gracias por destensdarme..porqe tengo eskribir un ensayo sobre tema libre ecepto temas qe todos usan hahaha el profe de socilogia se pasaaaa ok byes adios se kuida…xD