¿Cuántos de nosotros soñamos con vivir exclusivamente inmersos en la literatura? El grupo Flux Factory, de Nueva York, lleva el concepto hasta el paroxismo: este sábado inició su instalación artística Novel, que consiste en encerrar en cubículos contiguos a tres escritores para que, en un plazo de un mes, escriban sendas novelas.
Los escritores son Laurie Stone, de 58 años; Ranbir Sidhu, de 38 —quien además es arqueólogo y ha descubierto los restos fósiles de una chica de 3.000 años de antigüedad—, y Grant Bailie, de 43, quienes deberán mantenerse encerrados —con sólo noventa minutos de libertad diaria— hasta el próximo 4 de junio. En ese lapso, cada sábado habrá una lectura pública del trabajo adelantado, se realizarán dos foros —este domingo y el 22— y el público podrá ver a los escritores trabajando los lunes, miércoles y viernes entre 3 y 5 de la tarde y los sábados y domingos de 12 del mediodía a 4 de la tarde. La iniciativa también involucra a la firma Salazar Davis Architects, el dúo de arquitectos Tricky Inc. y el arquitecto Ian Montgomery, diseñadores de los tres cubículos.
Para el momento en que escribo esto, Stone es la única que ha publicado lo escrito en su blog (cada escritor tiene un blog; los tres blogs tienen un post inicial estándar). Y no sé si me estaré pasando de exigente, pero me pareció un inicio pobre:
Emily, a beautiful Brit with wavy, blond hair, came to the opening party. We sat on the floor of my little house, and when she bent her head, I noticed auburn and copper strands mixed with the blond.
¿Supresión de la libertad para escribir una novela? No suena descabellado; después de todo, es común que los escritores más consumados se encierren voluntariamente para escribir.
Previo registro (gratuito), se puede leer esta nota del The New York Times en la que se incluye un juego de fotos como la que ven al principio, y en la que se muestra, de izquierda a derecha, a Bailie, Stone y Sidhu.
wow que interesante, pero también extraño no te parece?, muchos saludos Jorge!
Aunque toda persona que escribe puede decir en algún momento que necesitaría de ese tipo de dictadura para sentarse realmente a escribir un texto largo, al final el silencio -el vacío creativo, la apatía- podría ser una forma de rebeldía ante la supresión de la libertad…Yo, no lo puedo negar, necesito combinar el «manguareo», el relajo, la dispersión, con la metodología y el «sudor» de sentarse ante el teclado.
Saludando y fuera de tema. Hay un Blog (http://www.ecuaderno.com/) muy prestigioso en la Blogósfera, que tiene una sección «(re) Descubriendo blogs» y en su sección de «Literatura» te hace referencia…
Así es, Marianne; es que esos escritores son tan extraños…
Aprendiz, coincido contigo en la necesidad de cierto manguareo entre párrafo y párrafo, entre cuento y cuento, entre poema y poema. Supongo que así se mantiene la mente fresca y dispuesta.
Unocontodo, gracias por advertirlo. Por cierto que me gustó la foto de playita con tu logo explayado allí sobre la arena.