El Ministerio de Educación de Argentina se ha destacado en los últimos tiempos por emprender campañas de lectura que en Venezuela, donde estamos tan jojotos en esa materia, se nos hacen sumamente interesantes. La más reciente es esta, que consiste en distribuir cuentos en las peluquerías. El nombre de la campaña es algo soso, pero claro que eso es una cuestión subjetiva y estoy hablando desde mi punto de vista. Además, qué importa. Siempre será mejor, antes de hacerse un corte de cabello, leer un cuento que una revista de farándula.
Lo que sí me parece bastante extraño es que los diez cuentos con los que arranca la campaña han sido divididos en cuentos para mujeres y cuentos para hombres. Ajá, exactamente como en las escuelas de antaño. Me pregunto si por ser hombre están vetados para mí los cuentos de Susana Kesselman, Inés Fernández Moreno, Alfonsina Storni, Maitena y Luisa Valenzuela, o si las chicas argentinas sufrirán algún problema de identidad de género al leer los cuentos de Abelardo Castillo, Claudia Piñeiro, Isidoro Blaisten, Alejandro Dolina y Miguel Briante. ¿Algún argentino que haya visto ya las ediciones? Me gustaría saber si las portadas han sido coloreadas de azul y rosado…
Hacer una crítica a distancia sobre la forma de algo específico, resulta arriesgado sobre todo cuando el fondo de la cuestión nos parece muy bueno. Eso de cuentos para mujeres o para hombres parece un poco traido de las costumbres de otras generaciones, sobre todo hoy día donde uno y otro ser humano de diferente sexo se aceptan mutuamente como seres inteligentes y pensantes. Pienso más bien que esa diferenciación en la literatura ha sido una travesura para incitar el interes de los lectores. Así se verá que los hombres leerán más los cuentos de mujeres y viceversa, pues no existe nada más atractivo que lo prohibido.
Por otro lado, es una excelente idea, y podría implementarse en venezuela en los centros comerciales, o mejor aún, en los baños públicos, pues ¿Quien no ha dicho alguna vez que es en el baño donde se le ocurren las mejores ideas y los más profundos pensamientos?
Podría estar hablando de estas cosas toda la tarde, pero ya no los cansaré con mis meditaciones. por lo pronto saludos a toda Letralia y a escribir y a leer.
Si nos atenemos al género de la gran mayoría de los lectores (en el que el femenino es abrumadora mayoría, tanto para pastiches edulcorados como para luminarias imprescindibles), me temo que le sorprenderá más al varón no encontrar el diario deportivo que a la mujer hallar un cuento en vez de otro (el chino y rosa del cotilleo).
No hay bemoles de poner a Horacio Quiroga, y que se ahorque la gente con el cable del secador.
Es broma, me gusta Quiroga. Lo decía por el tono.
En fin, no me hagan caso. Felicidades por este espacio recién descubierto por mí.
Me ha encantado el comentario de Severo Insausti que no es nada de severo, por el contrario, muy abierto y objetivo, saludos respetuosos Maestro