Una vez al mes y desde hace un año, Tarak menstrua con toda normalidad. Sufre dolores de estómago, náuseas y calambres, sangra y se pone de mal humor. Lo extraño es que Tarak es un joven varón de 15 años.
El caso mantiene ocupados a los médicos del pueblo de Kalna —200 kilómetros al norte de Calcuta, en la India—, donde el joven Tarak vive en el seno de una familia de escasos recursos a la que le ocultó un año completo el fenómeno de su menstruación, por razones obvias. Uno de los médicos dice que, aunque existen precedentes, el caso debe ser tratado porque podría traerle complicaciones de salud al chico.
Por el momento, se le realizan exámenes cromosómicos y hormonales y se investiga el «flujo menstrual» de Tarak para determinar si hay presencia de óvulos, lo que le daría más singularidad a esta historia. La nota no indica por dónde menstrua Tarak, pero sólo imaginarlo me produce escalofríos.
Perdón por la ironía, pero uno entre millones puede entender lo que nos pasa. Así de literal!
Saludos!
Estas cosas no se le cuentan a un aprensivo repleto de rarezas.
Así es, Kleine, con más casos como éste quizás se desvirtuarían todos los chistes machistas…
Eso debe ser lo peor de ser mujer… pobre Tarak!