No quise dejar pasar la oportunidad de reproducir este agudo comentario que Ariel Corbat acaba de dejar en mi nota sobre el premio Tusquets de Novela, recientemente declarado desierto. Aquí tienen. Gracias, Ariel.
RESPECTO AL PREMIO TUSQUETS DE NOVELA.
El jurado del Premio Tusquets de Novela, al cual se presentaron cerca de 800 obras, ha decidido declararlo desierto. Concursé presentando mi comedia Con valor, Susvín, a la cual —como seguramente piensa de su obra cada uno de los otros concursantes— creo con méritos suficientes para ser galardonada. La posibilidad de declararse desierto el premio estaba contemplada en las bases del mismo, no obstante hay un par de cosas que quiero decir. Siendo un militante del marxismo línea Groucho tengo la impresión que desde el momento en que los jurados tomaron mi libro cayeron al suelo rodando de risa, y que algún día esperan leerlo. Ciertamente esta queja de mi parte puede hacerme parecer un escritor fracasado y resentido, ¡pero que nadie se equivoque!, soy realmente un escritor fracasado y resentido.
Que entre 800 obras no hayan sido capaces de encontrar una que pueda dignamente estar a la altura de Editorial Tusquets me hace pensar que los jurados y la Editorial tienen una imagen sobredimensionada de sus propias cualidades. Diría que somos tal para cual.
Cordialmente, Ariel Corbat.
Por cierto que Fran Ruiz hace un interesante recorrido por algunos de los más espeluznantes escándalos de los tiempos recientes en materia de premios literarios.