Claudio Castillo nació en Santa Cruz en 1941 y murió allí mismo en 1994. Fue uno de los artistas más destacados de la zona y supo multiplicarse en dramaturgo, poeta, titiritero y animador cultural, además de su pasión principal, la pintura. Su obra pictórica fue elogiada por Aquiles Nazoa y sus cuentos y obras de teatro ganaron premios por doquier. En Letralia publicamos en 1996 su cuento «Guajara», que encabeza el libro Guajara y otros cuentos, publicado en 1995.
Una tarde se lo consiguió el pintor Rafael Herrádez en la panadería más céntrica de Cagua, justo al frente de la plaza Sucre, donde cientos de parroquianos —incluyéndome— suelen saludarse a diario y contarse venturas y desventuras. Claudio acababa de pedir un café y pidió otro para Rafael, el más simple gesto afable que puede hacerse en homenaje a un amigo.
Uno de los austeros placeres de tomar café en una panadería es ver cómo el azúcar se sostiene sobre la superficie espumosa durante unos segundos. formando una pequeña isla de arena blanca. Claudio observó con reverente silencio cómo los granitos perdían consistencia y la isla sucumbía al naufragio.
—¿Lo ves, Rafael? Aquí había una isla y ahora no hay nada. ¡Qué fácil es hundir a un pueblo!
Una mezcla de fortalezas y debilidades de Claudio le robaba de manera intermitente el contacto con la realidad. Con la llaneza característica del santacrucense, sus coterráneos se conformaban con saber que Claudio estaba loco.
Debes tener cuidado con la diabetes… ¡hay que ver el tamaño de la isla en la taza de café! 🙂
Así es, tocayo. Y fíjate qué interesante la amenaza implícita en la cucharilla que descansa al borde del plato. 🙂
Es un placer, no solo como hijo menor de claudio castillo sino como un pasajero del mundo extraño y apasionado de las letras, en ver y leer como otras personas recuerdan a un hombre que dejo una luz multicolor, un canto eterno sobre los lienzos y un suspiro a la mirada de todos los que delitan su obra. Claudio dejo para aragua y para venezuela un legado ingenuo, creativo y magico.
color de vida,
poesia infantil,
luz con semilla
cafe con infinita isla.