Llego a Repetition Detector por recomendación de Mirco Ferri, quien andaba buscando algo así para sus nuevos cuentos. Se trata de una herramienta más necesaria de lo que parece a simple vista: un programa que encuentra palabras repetidas en un texto, como ya puede suponerse por su nombre. No necesita instalación, para usarlo basta con descargar este archivo .zip y descomprimirlo en la carpeta que quiera asignarle el usuario.
Hice la prueba con uno de mis cuentos. Lo abrí en Word, lo copié al portapapeles con la combinación de teclas Ctrl+C, lo pegué en la ventanita de Repetition Detector con Ctrl+V, hice click en «Process text» y encontré que «para» aparece demasiadas veces, y como se ve en la imagen, algunas muy cerca. Si una palabra se encuentra al menos seis veces en un rango de 1.500 caracteres, se considera repetida (el usuario puede ajustar estos parámetros). También se consideran repeticiones palabras con raíz similar, como «para» y «parada», que se ve en la imagen.
El programa muestra también un informe con las cincuenta palabras que más se repiten y la cantidad de apariciones de cada una –en la imagen también se ve que aparte de «para» la otra palabra que más se repite es el nombre de la protagonista–, destaca con colores las palabras repetidas y permite excluir ciertas palabras del conteo. Y si se hace click sobre una palabra, se destacarán en rojo todas sus apariciones. Prácticamente no hay límite de extensión: el programa procesó un texto de trescientas páginas en unos pocos segundos.
Actualización del 5 de noviembre de 2014
Repetition Detector 2, nueva versión del programa, incluye nuevas funcionalidades, entre las que se encuentra el soporte para español, portugués, italiano y otros siete idiomas. Es gratis sólo por un mes y luego debe pagarse una licencia de 7,40 dólares. Mi sugerencia es: si lo usas con regularidad, mejor es comprar la licencia; de lo contrario, todavía está disponible en el sitio la versión 1, que es gratuita.
Coño jorge muy buena la cosa, muy util el programita. Para muestra un botón: «Pero justo cuando iba a proponerle que dejara lo que estaba haciendo y se pasase para la cama, fue y me dijo, sin dejar de verse en el espejo y sin dejar de hacer lo que estaba haciendo: Te dejo Joao.» Bueno no he sabido resaltar las palabras repetidas. Ya las veras tu. el caso es que estas repeticiones las dejo (jeje otra vez la palabrita) porque le dan cierto tono irónico a la situación: el hombre quisiera que la mujer dejara de hacer lo que hace pero ella lo único que deja es de quererlo. bueno un abrazo,
joaquín
genial, gracias Jorge!
Jorge, pero funciona con IOS? Just wondering…
OA
Qué va, Ophir, es una aplicación del mundo Windows. :/