No soy fanático de escribir con música. De hecho, la música puede desconcentrarme en la mayoría de los casos. Sólo algún cuento me ha salido bajo el influjo de la música, como “El plan”, que tardé todo un año escribiéndolo y no podía hacerlo sin un disco de Chopin que me bajaba las defensas emocionales.
Sobre este asunto la gente de la Escuela de Escritores, siempre tan creativa, está presentando hoy su concurso de relatos con banda sonora: los participantes deben utilizar sus melodías favoritas como inspiración para retratar a los personajes, crear la atmósfera apropiada o desencadenar el conflicto, todo en mil palabras e indicando la canción y el intérprete involucrados.
interesante concurso, a ver si nos animamos…
salud
j.
Yo no sé cómo Stephen King puede escribir escuchando rock heavy metal.
Bueno, quizás eso lo explica todo.
Saludos!
No soy mujer, por lo tanto sólo puedo hacer una cosa cada vez. O escucho música o escribo.
Jorge ¡sensacional idea! Mi caso es contrario al tuyo: no puedo escribir sin música…y si es posible tenerla a la mano cuando estoy trabajando en fotografía (otro medium más que podrías considerar para mezclar con vocablos)las composiciones fluyen y se fugan en las mejores diagonales.
¡Enhorabuena! Espero tener tiempo suficiente para enredarme en esto.
Saludos afectuosos,
Valentina
http://www.valentinavitols.com
http://vv-c.spaces.live.com
una invitación, a que ponagas en tu cd-player el álbum «Ambient 4- On Land» de brian eno y el último tema, que acaso ese sea el sonido de toda una generación de escritos contemporáneos.
un saludo